Libertades domesticadas

La sección "Reflexiones" de Libertad Animal, se ha creado para exponer aquellos pensamientos, ideas, reflexiones o críticas que tu quieras exponer y compartir con todos en nuestro blog. Si quieres realizar tu aportación, te dejamos toda la información necesaria al pie de este post.


La mayoría de las veces, cuando hablamos de mascotas nos referimos a perros y gatos. Eso se debe a que son los únicos animales que han pasado tanto tiempo en período de domesticación que se han adaptado hasta convertirse en lo que se puede catalogar como "animales domésticos". 
Sin embargo, no hay que pasar por alto la reciente oleada de interés en animales exóticos. Cierto es que siempre ha habido cierta fascinación por las especies raras, pero también lo es que hasta hace unos pocos años no ha sido tan generalizada la tenencia de dichos animales como mascotas. Y ello, por supuesto, entraña algunos peligros. 
Para empezar, el más obvio de todos que es el tráfico de animales. Esto conlleva caza furtiva, encierro y unas condiciones deplorables hasta que llega a su destino, probablemente una estantería donde poner este "trofeo". Pero no os penséis que ese es el único, ni tampoco tiene por qué ser necesariamente el más peligroso.

Hay trámites legales para poder tener una especie exótica como mascota. Lo principal, especialmente cuando se trata de animales muy raros como por ejemplo un perezoso, es que éste se haya criado en cautividad. Lo cual significa que el animal ha sido criado en una pequeña prisión para que tú lo tengas, y quién sabe el trato que habrá recibido la madre (ya que existen encantadores artefactos como el llamado potro de violación, que por ejemplo se emplea en algunos criaderos de perros). De no haberse conseguido el animal por la vía legal, hay maneras y sitios donde denunciar. Aquí un enlace: http://labogota.blogspot.com.es/2011/02/como-denunciar-un-caso-de-trafico-de.html
Pero una vez el pequeño ya está en casa, la gran pregunta es: ¿cómo cuidarlo? Es posible que haya poca información del asunto y, peor aún, que los "dueños" ni siquiera se preocupen de encontrarla. Voy a poner un ejemplo muy concreto que en lo personal me ha tocado de lleno: los conejos.
Cuidar bien de un conejo no es tan fácil como algunas personas suponen. Para empezar, hay que saber que su dieta consta básicamente de heno, un 70% para ser más exactos. Este heno, para ir bien, no tiene que estar ni muy húmedo ni muy seco. El resto de su alimentación puede ser verdura, o un 20% de verdura y un 10% de pienso. Sin embargo, un conejo no puede comer ningún cereal, como tampoco patatas, cebolla o ajo (y la lista sigue y sigue). Y hay que tener controlado las veces a la semana que se les da x comida, por ejemplo: la fruta no la pueden comer más de 3 veces a la semana. Además, un conejo sano tiene que estar un mínimo de 4 h suelto al día. 

¿Por qué digo todo esto? Es fácil: si una mascota que se está popularizando tanto como es el conejo todavía trae bajo el brazo tantas sorpresas, ¿qué pasará con animales que nos son todavía más extraños? ¿Estamos realmente preparados para ocuparnos de una mascota, o se trata de un capricho egoísta con el que la haremos sufrir? Ni siquiera hace falta, por supuesto, que sea un animal raro: un perro que no sale las suficientes veces al día o que no recibe el cariño que necesita, también se podría decir que sufre un tipo de maltrato. 
Ya no se trata de campañas de concienciación ni nada parecido. Se trata de sentido de la responsabilidad. Se trata de pensar un poco antes de coger una mascota, puesto que no estás consiguiendo un juguete, sino un compañero..., un amigo.
Claro que todos nos equivocamos. Por suerte para todos, existen las segundas oportunidades y la recapacitación. 

Espero que no sea demasiado largo.

Además, me gustaría proponer un debate -si no se ha abierto ya- sobre el pienso vegetariano para perros y gatos. 

¡Hasta la próxima!

28, Octubre 2013
Enviado vía email libertad-animal@hotmail.com

Comentario de Libertad Animal:
Qué razón tiene esta reflexión. Estamos abarcando demasiadas especies y apropiádonoslas en nuestros hogares, sin tener idea de cuáles son sus necesidades, porque no nos importan sus necesidades, sino las nuestras y ahí está realmente el problema. Otro ejemplo, además del que comentar del conejo, sería el caso de los hurones, las chinchillas e incluso los cerdos vietnamitas, estos últimos ya se pueden comenzar a encontrar en protectoras por haber sido abandonados al crecer. En definitiva, sabido es que el ser humano es egoista, pero sí que veo un cambio hacia la responsabilidad en general de la población. Cada vez somos más los que nos preocupamos por los animales e intentamos concienciar a los demás sobre ellos. Espero que acabe en una evolución, ya no solo de costumbres, sino de pensamiento.

Muchas gracias por tu reflexión y participación!!
Libertad Animal



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1 comentario:

  1. Por cierto!! Tendré en cuenta el debate que planteas, pues es interesante y además esta bien dar información sobre este tema a las personas que nos leen. GRACIAS =)

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